martes, 15 de agosto de 2023

Recuerdos de una rata de alcantarilla

 Esta es la historia de I, una hermosa joven que conoci en la Universidad, me enamore de ella, era una mujer extraordinaria, el sueño de todos, una mujer decente, hija de familia, recatada, timida, elegante, hermosa piel blanca, unos de los ojos verdes mas tiernos que hubiera visto.

La conoci en la Facultad, en una materia de Calculo, y claro que me atrajo, de sobremanera, era una de esas mujeres que son extraordinarias, asi que comence el cortejo, y como yo tambien era un hombe medio decente, ella me empezo a hacer caso, salimos un par de veces, nada mas feo que ir a comer helado al centro de Coyoacan, la acompañe a su casa varias veces, conoci a su hermano y sorpresivamente a sus padres, incluso ella me invito a ir a misa, un domingo.

Eso fue algo que no me desconcerto, sino que me indico algo, yo ya no era catolico, estaba en mi primer etapa de Ateismo, por lo que pense que esta seria una manera en que ella pensaba en salvar mi alma, pero para mi, era un indicativo de que algo no estaba bien.

Yo trabajaba los fines de semana, como chicharo de un consultor de ARH, viajabamos mucho, en esa ocasion, nos toco quedarnos en San Juan de los Lagos, mi jefe era creyente, lo acompañe mas por conocer el lugar que por fe, pero en la Iglesia me quede pensando en esa hermosa mujer, y llegue a la conclusion, muy rara en mi vida, de que ella era muy superior moralmente a mi, que era un vil rata de alcantarilla, con mas novias de las que podia recordar y una vida muy desordenada.

Decidi regresar el pececito al agua y retirarme, ya tenia practicamente conquistada la plaza, pero era incorrecto, ella merecia a alguien mejor, que pudiera ser como ella y darle la forma de felicidad que ella merecia.

Hubo un ultimo intento de ella de no dejarme ir, unas palabras que jamas olvidare, ¿que es el planeta X?, ella sabia que acababa de ir a un Seminario de la NASA y que habiamos tratado de ese tema y me fascinaba, pero me di cuenta, y conteste muy brevemente, despues de esto, me aleje de ella, convencidisimo de que yo era una mala influencia.

Un clasico error de juventud, si, yo era un pecador de primera, un ateo consagrado, un hombre con una vida desordenada, y que pronto se volveria un vago mundial, pero eso no me hacia un mal hombre, al contrario, siempre fui un hombre decente, quiza el unico que le hubiese dado una vida extraodinaria, como la que ella merecia. al final no se que fue de ella, y no he querido preguntar a nuestros amigos en comun, pero sinceramente espero que fuera feliz, que encontrara alguien que la amara tanto, como ella merecia

Y es que hay un fenomeno que me ha tocado ver en la vida, hay muchas veces que un hombre, asi de feo como era yo, es la mejor pareja de una mujer asi, porque ella lo puede corregir y el tener la entereza de darle una vida feliz, porque comprende perfectamente, quien es ella, porque la admira, son una especie de complementos contrarios, que suelen tener una vida feliz.

Es en resumen lo que hacian los hombres desde siempre, divertirse con muchachonas y quedarse con una mujer, a la que ya le pueden ser fieles y obedientes, porque ya vivieron, se divirtieron y aprendieron el valor de una mujer decente y lo mejor, como tratarla.